Decálogo para Enfermos sin compañía
No estoy sol@… los míos no pueden estar aquí, pero SIEMPRE estoy y me siento acompañad@. Hago las paces conmigo mism@: yo no soy el enemigo y me conviene ya ser mi mejor amig@. Hoy perdono mis errores vitales: son pocos, aunque fueran trascendentes en su momento. Olvido mis errores esenciales: ya están borrados por la Historia, por mi Dios y la Naturaleza. Perdono a los otr@s: …